Con el calor aparecen los primeros síntomas de piernas cansadas, y tobillos más pesados e hinchados de lo habitual.
El aumento de las temperaturas afecta de forma directa a los vasos sanguíneos, y a la circulación de la sangre en extremidades. Una de las principales medidas a tomar es la reducción de sal en las comidas, y menor ingesta de azucares (refrescos, helados,...), tan apetecibles para contrarrestar el calor.
¿Que debemos hacer para aliviar las piernas cansadas?
Simples hábitos como duchas frías relajantes en pies, y aplicar una crema refrescante, que alivie la pesadez, son fundamentales; evitar la exposición continuada al sol; caminar y activar el flujo sanguíneo, realizar algunos ejercicios con las piernas en alto.
Si eres de las que con estas medidas no tienes suficiente, y necesitas de ayuda adicional, no olvides los efectos favorables y sanos de la presoterapia.
La realización de un masaje drenante-circulatorio a manos de tu esteticista titulada, también será beneficioso en casos de piernas con problemas circulatorios, y ayudará en los problemas de retención de líquidos.
Podemos tener en cuenta la ayuda de la nutricosmética como complemento a nuestra dieta diaria.
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